Informe Preliminar Conders - Tucumán 2010

14.04.2012 23:47

 

Monitoreo Social  y Mecanismos de exigibilidad sobre Derechos Sexuales y Reproductivos en el Departamento Trancas,  Provincia de Tucumán

Informe Preliminar

 

El trabajo de monitoreo  y exigibilidad se esta realizando en el Departamento Trancas. Esta localidad se encuentra a 72 Km. al Norte de la ciudad de San Miguel de Tucumán. Esta ubicada en la cuenca Tapia- Trancas. Es importante recordar, que este departamento es limítrofe con la provincia de Salta.

Se relevaron cinco lugares claves, de acuerdo a nuestro criterio,  para entender la problemática de los derechos sexuales y reproductivos y su vinculación con la interculturalidad y una perspectiva de género. Se realizaron las grillas a las responsables del Hospital (ubicado en la ciudad de Trancas) y de cuatro CAPS (Benjamín Paz, Choromoro, Chuscha y Vipos). Cabe recordar, que en esta última localidad se ubica la mayor cantidad de migrantes bolivianos/as de acuerdo al estudio realizado por  Rivas[1] provenientes de Tarija y Potosí.

La comunidad boliviana se dedica al trabajo de la tierra, especialmente, al cultivo de hortalizas. La producción de hortalizas y verduras es ofrecida en el MERCOFRUT (principal centro de abastecimiento de frutas y verduras de la provincia). Es importante señalar, que uno de los principales focos migratorio de la provincia es la localidad de Lules. Sin embargo, en el Departamento Trancas es significativo el numero de migrantes, especialmente, si se tiene en cuenta que es una localidad reconocida como de paso entre las provincias del Norte y el Sur. Por otra parte, las tareas productivas son de carácter intensivo y estacional. Esto permite el traslado dentro de la provincia de los/as migrantes de acuerdo al tiempo de la siembra y cosecha de las hortalizas de hojas verdes y frutos, especialmente, el tomate y la frutilla.

Durante esta etapa se realizó un trabajo intensivo con la confección de las grillas propuestas por CoNDeRS. Debemos aclarar que se agregaron una serie de preguntas orientadas no sólo a indagar sobre la transformación del servicio de salud, como señala la Ley 25.673 sino a investigar acerca de acciones o medidas llevadas a cabo desde CAPS y el hospital para prevenir, identificar grupos vulnerables, reconocer cuestiones relacionadas a la diversidad cultural, trabajar con adolescentes y promover una participación activa con mujeres.

 Paralelamente, se confeccionó una encuesta destinada a las/os usuarias/os de los servicios de salud con la finalidad de contrastar las respuestas oficiales con la de los/as usuarios/as y recoger información que permitió orientar, de manera definida y concreta, las acciones de exigibilidad que se realizarán en la segunda etapa.

Entre los resultados debemos destacar que en el Hospital de Trancas como en los otros CAPS, durante el periodo de diagnostico estaban afectados a un conflicto gremial entre médicos/as autoconvocados/as y las autoridades del ministerio de Salud de la provincia de Tucumán.

El nosocomio está ubicado en una zona limítrofe con la Provincia de Salta y esta a 70 Km de la cuidad de San Miguel de Tucumán, lo que lo convierte en un referente sanitario en caso de urgencias y/o accidentes en el área.  Es importante señalar, que durante los meses de enero y febrero aumenta la circulación de personas ya que dentro de este Departamento esta ubicada la villa veraniega San Pedro de Colalao. Es decir, que es un centro de atención sanitaria de referencia en el norte de la provincia y que, de acuerdo a nuestro relevamiento, esta siendo remodelado.  En la actualidad el quirófano no esta en funcionamiento a lo que se suma la falta de personal, especialmente  anestesistas y patologos/as. Estas ausencias hacen que los partos (y otras intervenciones quirúrgicas) sean derivados a la Maternidad  sita en la ciudad de San Miguel de Tucumán. Además, la realización de análisis especialmente los PAP no se realizan allí sino que las muestras son enviadas al Centro de Salud, ubicado este también en la capital provincial. La entrega y los resultados de estas muestras pueden tardar aproximadamente un mes y medio, en el mejor de los casos, si no existe ningún conflicto gremial que pueda provocar que las extracciones se pierdan o se venzan. Por otra parte, en el hospital no existe un mamógrafo y los turnos de las ecografías son muy distanciados en el tiempo. Además, cuenta con una sola ginecóloga que atiende de lunes a jueves de 7 a 13.

Como se puede observar existen importantes carencias, no solo referidas a la cobertura de los derechos sexuales y reproductivos en particular, sino de los derechos en general, especialmente el del acceso a la salud.

En cuanto al relevamiento de en los CAPS podemos observar ciertas continuidades y diferencias en cuanto al trabajo que se realiza, principalmente con las mujeres. En el caso del Centro de atención primaria de Chuscha la entrevistada señala que ellos llevan un censo de la población migrante. Tienen un registro de las familias. Cada familia cuenta con una carpeta en la que se lleva registro de los controles de los miembros de la misma. Ella insiste en que los hombres sólo se acercan al CAPS cuando están muy enfermos, más que nada se acercan para control las mujeres y los niños. La mayoría de la población migrante se desplaza siguiendo los tiempos de cultivos y de las cosechas. El circuito incluye Lules, después Mendoza (en algunos casos) y de ahí de regreso a Chuscha.

En el 2009 trabajaron con los dos residentes que tenían buena relación con los varones de la zona. Entonces hicieron experiencias de invitar a mujeres con sus parejas y a varones a las charlas de prevención.

En cuanto a la población migrante, la informante afirma “cuesta adaptarlos a nosotros y nosotros a ellos”. La mejor experiencia la tuvimos en control prenatal con la comunidad boliviana. Hicimos un trabajo con las adolescentes. Ellas aceptaban de manera más fácil el embarazo adolescente. Muchas (de entre 14 y 15 años) preguntaban sobre la leche, el periodo de lactancia. Pasó con las jóvenes argentinas que sus preguntas eran más “superficiales”, intentaban saber sobre la caída de los pechos después de dar de mamar.

La comunidad boliviana se resiste a la anticoncepción. Las mujeres no los toman porque los hombres no aceptan. Dicen, según la médica, que “se les arruina la mujer”. No quieren hablar de cesárea tampoco ni de concepción quirúrgica. A la mujer la llevan a trabajar en el campo embarazada. Asisten más las mujeres de la zona que la migrantes. Pero cuando son mamas vienen a todos los controles y las vacunas. “Quizás sea por la cercanía, no les gusta movilizarse por otra cosa que no sea trabajo, pero confían mucho en nosotros”.

“No tuvimos problemas con el movimiento de los pueblos originarios. Acusan de discriminación en la escuela pero no en CAPS. Aquí para nosotros son todos iguales. No importa si son pueblos originarios o bolivianos. Hacemos un uso racional de lo que tenemos. Tenemos capacitación en recursos humanos, nos preparamos pero por ahí nos faltan recursos financieros. No tenemos ambulancia. No hay ginecóloga. Estamos capacitados para atender situaciones de primer y segundo riesgo. Pero sí la capacitación es amplia en salud, prevención y promoción. Trabajamos casi en automático con vacunas y control prenatal pero tenemos deficiencia en atención adolescente y en control de la población por ¡que no vienen los hombres por ejemplo”

Según la Dra. tratan de integrar a la familia en salud sexual y reproductiva. Llegado este momento ella me lleva a otra habitación en la que se observan paneles con hojas A 4 en las que figura impresa la información que procesada desde abril del 2009 a abril del 2010. Recaban la información trimestralmente.

Llevan un censo interno. Saben que la comunidad cuenta con 1375 habitantes. Hay otro grupo que es el que se moviliza. Hay 33 familias migrantes. Señala que las familias se instalan en asentamientos. Cuando llegan se les hace una historia clínica. En base a lo trabajado se hacen estadísticas y de ahí se modifican acciones para el año siguiente (si se registran más embarazadas, señaló como ejemplo, se intensifican las actividades orientadas a la prevención).

Se trabajan todos los programas que vienen de Nación. Ellos lo modifican y lo adaptan a su realidad. Al de entrega de anticonceptivos lo “dieron vuelta porque están hechos desde un escritorio” y lo implementan como un programa de salud integral de la mujer.

Los maestros, según la médica, tienen miedo de dar charlas de salud sexual y reproductiva. “Nosotros vamos a hablar de valores. Que la mujer se quiera y se cuide. Se trata de que lleguen a la secundaria sin miedos. No sabían por ejemplo qué es el ciclo menstrual. Nos falta. Hay un nexo que tenemos que hacer. Los residentes son los que tienen la posta”. Las enfermeras no dan estas charlas, han recibido capacitación pero dependen de la capacitación del SIPROSA. No hay enfermeras profesionales. Los médicos en cambio tienen su formación.

Podemos observar que en este lugar, de acuerdo a los datos relevados, se esta trabajando sin grandes inconvenientes sobre salud sexual y reproductiva. Pero es un caso particular, ya que en otros centros de atención primaria como es el caso de Vipos no sucede lo mismo. A partir del relevamiento que se hizo, especialmente, de las encuestas, las usuarias no tenían información, por ejemplo sobre ligadura de trompas. Muchas veces en el CAPS no tenían anticonceptivos cuando ellas iban a solicitarlos. Además, la ginecóloga solo atiende dos días a la semana. Y lamentablemente, durante el relevamiento, no se presta el servicio puesto que esta de licencia y no se ha nombrado a ningun/a suplente. Otro de los problemas que se presentan en este lugar es que, tanto las consultas  como los pedidos de métodos anticonceptivos se  realizan por  la mañana lo que complica el acceso a los servicios, dado que se presentan dificultades por la distancia y la coincidencia de los horarios laborales.

En cuanto a la localidad de Benjamin Paz, podemos decir  que existe un centro de atención primaria de salud que será inaugurado en el corriente mes. Es un centro de excelente infraestructura, aunque se  percibe cierta falla en atención médica, ya que no existe servicio de ginecología. El CAPS ofrece servicios de clínica general y odontología La atención  se realiza tres veces por semana.   Los días martes y jueves por la mañana no existe ningún/a medico/a. Los miércoles y viernes a la tarde tampoco se brinda atención.

Es importante destacar que todos estos centros de atención primaria cuentan con radio de comunicación directa con el  área operativa de Trancas, especialmente para el requerimiento de las ambulancias.

En el CAPS se atienden entre 40 y 50 personas por día, de acuerdo a lo manifestado por la  informante. Aunque se pudo contrastar que con la información brindada por una usuaria de la localidad solo dan ocho números. Además, manifestó que existen  malos tratos por parte la enfermera.  En cuanto a las mujeres bolivianas no se quejan de nada. Manifestaron que ellas eligen ser atendidas por la doctora.

En la localidad  de Vipos las usuarias  manifiestan que están  relativamente conformes a que la calidad del servicio y de la información brindada sobre SSyR es satisfactoria. Hay consenso con respecto a los horarios de atención, los mismos que manifiesta la médica residente. Manifiestan que han recibido buen asesoramiento a la hora de elegir métodos anticonceptivos y que no suelen estar en falta, y que en el caso de que sucediera son informadas en su domicilio cuando estos llegan. En un caso manifiestan haber visto situaciones de discriminación a una joven que pedía preservativos, por el hecho de ser considerada demasiado joven para tener relaciones sexuales. Por otra parte esta disponible la AHE y una de las encuestadas manifestó haber hecho uso de ella. Además, destacaron que han recibo información sobre VIH.

Durante este relevamiento en el área Trancas se detectaron algunas manifestaciones de discriminación a las migrantes bolivianas. Ellas manifiestan que no asisten al hospital porque son maltratadas. Solamente, llevan a sus hijos/as y nietos/as porque estiman que son “argentinitos”, por lo tanto tienen acceso a la salud.

Por otra parte, durante esta etapa, se realizó un seguimiento de las notas presentadas a organismos gubernamentales durante el año 2009.  Es de destacar
como ya se informó oportunamente,  que en la provincia existe una considerable resistencia a la temática, especialmente cuando se solicitan datos sobre salud sexual y reproductiva.

Se solicitó información al SIPROSA, al Ministerio de Salud de la Provincia y al Programa de Salud Integral sobre la participación de la sociedad civil en la planificación y evaluación    del PSSyPR; cobertura del programa, cantidad de personas bajo PSSyPR; procedimientos cuando existen incumplimientos del Programa; proporción del personal capacitado en el periodo 2009 sobre SSyR; disponibilidad y entrega gratuita de MAC; existencia de material educativo y de difusión; articulación con el equipo que trabaja en la implementación de la ley 26150; articulación con la unidad coordinadora VIH-SIDA/ETS; acciones previstas para el año 2010, que reviertan la situación planteada, en virtud de garantizar los derechos sexuales y reproductivos de toda la ciudadanía. Esta información no fue remitida, hasta el momento de la realización de este informe al equipo CoNDeRS, alegando que se perdieron las notas presentas y/o argumentando que no se encuentran las personas que podrían responder al respecto. En cuanto a las notas presentadas en la Defensoría del Pueblo y la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, tampoco tuvieron respuesta hasta el momento. Esperamos que con el cambio de autoridades de la Defensoría se pueda lograr algunos avances al respecto. Por otra parte se tiene planificado, ante esta permanente negativa, apelar  al INADI delegación Tucumán para que intervenga al respecto.

Por ultimo, consideramos que una institución bien equipada y organizada no es suficiente para garantizar una repercusión positiva en relación a los objetivos fijados por el programa de Salud Sexual y Procreación Responsable. Es decir,  es necesario  generar el acceso a la información, métodos de prevención y detección de enfermedades y embarazos y servicios referidos a la salud sexual y procreación responsable mediante la creación sistemática de oportunidades de aprendizaje. 

 

 

 

Equipo CoNDeRS- Tucumán



[1] Cf. Rivas, A.: La estructura agraria económica y social en la zona de cultivos intensivos de Lules